En este primer capítulo se va a desarrollar un tema capital. Se va a tratar de explicar todo lo que encierra dentro de sí mismo ese sistema que conocemos como: El Modernismo. Y nos daremos cuenta que lo que alberga en sus entrañas tan nefasto medio, no son una o más herejías, sino que el Modernismo las cobija a todas, ya que es la síntesis y la cloaca de todas, ¡sí!, hemos dicho bien, de todas las herejías. Una vez que hayamos conocido su historia, sus personajes, sus herejías, quedaremos perplejos y anonadados al comprobar una y mil veces, que todo lo que propugnaban los modernistas, a los que la Iglesia católica combatía con uñas y dientes, pasó, por arte y magia de Belcebú y su Vaticano II, a ser el corpus doctrinal de la nueva y falsa iglesia. Merece la pena la charla, ya que nos ayudará mucho a descubrir que terreno estamos pisando y de esta manera no llegar a ser tragados por la tenebrosa ciénaga del error y la mentira. ¡Dios sea servido!

No tengáis miedo a los que matan el cuerpo y después ya no pueden hacer más… y nos sigue diciendo Nuestro Señor Jesucristo que al único que tenemos que temer es a Aquel que después de haber nosotros muerto nos puede mandar por toda la eternidad al infierno. Es decir que solamente debemos temer a Dios Nuestro Señor.